un amor de verano

Era un lugar para escapar. Una pequeña isla rodeada de un mar tranquilo, lo suficientemente alejada de su mundo como para olvidarse de todo, recuperar la calma y reencontrarse con ella misma. El lugar perfecto para Sara que estaba dispuesta a dejar de lado sus viejos amores tóxicos y empezar una nueva vida. Lo que no se imaginaba ella era que también era el lugar perfecto para empezar su mejor historia de amor.

La isla poseía la contradictoria vida vacacional que ofrece calma, relax, meditación o fiesta desenfrenada según las necesidades de cada cual. Sara iba en busca de sosiego. No así Mario, que bajó del barco con su grupo de amigos dispuesto a beberse las noches y no perderse ni un solo amanecer. Y fue en uno de esos amaneceres, mientras Mario despedía la noche, cuando conoció a Sara. Un amanecer en el que empezó una historia de amor.
Ligue de verano

Las reticencias de Sara a tener una aventura de verano en una isla perdida del mundo se vinieron abajo en cuanto Mario la hizo reír tres minutos después de haberse encontrado caminando por la playa. Su ingenio y su naturalidad la desarmaron y se dejó llevar. Al fin y al cabo, uno de sus propósitos para esas vacaciones era aprende a ser menos reflexiva, a dejar de darle vueltas a todo.

La verdad es que Mario se lo puso fácil; la verdad es que Mario hacía las cosas tan fáciles. Le proponía paseos en bici, cafés con charla en el puerto y siestas ardientes que se prolongaban hasta la mañana siguiente. Sara estaba viviendo una auténtica historia de amor de verano. Y como tal, sabía que llegaría a su fin.

Hasta el final de las vacaciones disfrutaron el uno del otro con toda la intensidad de saber a ciencia cierta que has encontrado a tu media naranja. Aunque los dos eran lo suficientemente realistas como para no idealizar estos amores de verano. Conocer la fecha de caducidad de su historia les hizo entregarse por completo, sin reservas, sin miedos.
El final del amor de verano

Pero el momento de la despedida llegó, al mismo tiempo que el final del verano. Y ninguno de los dos se atrevió a ir más allá, ninguno de los dos habló del futuro, ni de su historia de amor. Los kilómetros que separaban sus mundos eran suficientes como para no hacer planes y limitarse a recordar su amor de verano a través de Facebook.

Sara volvió a su vida. Tal y como se había propuesto, era una vida renovada, con cambios apreciables en su forma de tomarse las cosas. Más feliz, más optimista, pero ahora con un toque de melancolía que nunca antes había sentido. Porque esa melancolía era distinta, le dolía pero le hacía sentirse más viva que nunca. Y el motivo de su melancolía era Mario.

Mantuvieron el contacto en las redes sociales y, sin decirse nada el uno al otro, más que nada por no hacerse daño, los dos soñaban con volver a estar juntos. Con estar juntos para siempre. Fue ella la que un día le propuso volver a la isla, esta vez para quedarse. Y él aceptó, transformando así un ligue de verano en un historia de amor con final feliz.

Déjate llevar por los sentimientos y disfruta

Hace un tiempo que nos aficionamos a las cartas de amor y eso ha despertado nuestro lado más sensible. Y como somos muy curiosas, resulta que queremos saberlo todo sobre el amor, especialmente cómo hacer para disfrutarlo plenamente. Por eso estamos recopilando las mejoreshistorias de amor jamás contadas, las que ya se han contado y hasta las que se han contado a medias.

Queremos contar historias de amor en una especie de homenaje al amor, porque seguimos creyendo en el amor, a pesar de las decepciones, a pesar de los tropiezos. Y porque todas podemos vivir una historia de amor inolvidable. Pero para que no se olvide, tenemos que contarlo. Vamos a contar todas las historias de amor.
¿Cómo surge el amor?

Y mientras nos contaban tantas historias de amor, tan diferentes, tan apasionantes, algunashistorias de amor tristes y otras simplemente increíbles, nos hemos preguntado por el origen de estas historias, por el origen de amor. ¿Cómo surge el amor entre dos personas? Algunos dicen que es una tendencia innata sin explicación ninguna, otros dicen que es el azar; hay quien piensa que nuestras historias de amor surgen por el contexto sociocultural en el que hemos vivido. Y los más piensan que responde a procesos químicos de nuestro organismo.

Pero la verdad es que el origen del amor lo encontramos es la incoherencia y el capricho. Una incoherencia y un capricho personificados en la figura alada de un joven irresponsable armado con arco y flechas que va jugando con los corazones de los pobres mortales. Eros, oCupido, es el hijo adolescente y alocado de la diosa del amor, Afrodita.

Cuentan que ni siquiera Afrodita quiere sucumbir a esa parte irracional que tiene el enamoramiento y por eso ella gestiona otros factores del amor, como la pasión y el deseo, mientras que ha dejado en manos de su hijo el peso de crear historias de amor. No es extraño que algunas de esas historias de amor acaben mal o incluso peor.
Distintas versiones del amor

Pero si algo podemos reconocerle a Cupido es la variedad que aporta. Y es que podemos encontrarnos con historias de amor muy diferentes, algo que enriquece nuestra vida sentimental y mantiene nuestra esperanza de encontrar, algún día, una historia de amor con final feliz. Porque todas hemos vivido una historia de amor verdadero, una historia de amor apasionante o inolvidable, pero hay que reconocer que la mayoría de esas historias ya tienen punto y final.

Sin embargo, a través de todas las historias de amor que nos cuentan y que ahora puedes leer en Diario Femenino podemos comprobar que también hay historias de amor eterno, amores que han estado juntos desde siempre y se mantienen unidos para siempre, o amores que se descubren en la madurez pero que llenan como toda una vida.

Tenemos historias de amor para todas, para las románticas, para las clásicas, para las modernas, para la aventureras, para las melancólicas, para las dramáticas y hasta para las más cursis, pero sobre todo, con estas historias de amor queremos llamar la atención de esas escépticas del amor y enviarles un mensaje de amor para que vuelvan a recuperar la ilusión.

Historia de amor

Algunas historias de amor no tienen un final feliz pero tampoco son tristes. Algunas historias de amor son, sencillamente cortas. El amor en síntesis, el amor fugaz o el amor esquemático que no le resta pasión, ni intensidad ni importancia a una historia de amor. Una vez nos contaron estahistoria de amor corta, que duró el tiempo que dura un beso de amor.

Breve historia de amor

Ella necesitaba escapar de amores tóxicos, de mentiras, de manipulaciones, de engaños, de tanta dependencia, de los hombres equivocados. Necesitaba vivir por ella misma, quererse, gustarse, no necesitar. Por eso se fue de improviso a pasar unos días a otra ciudad. Un lugar para perderse entre monumentos y callejuelas estrechas que le devolvieran las ganas de hacer cosas, de interesase por otras cosas.

Él estaba agotado, vacío de amores intrascendentes, de historias sin finales felices ni tristes, de historias de amor que ni siquiera empezaban. El miedo a amar, la imposibilidad de entregarse a una persona era su obstáculo para sentir esa ansiedad del amor que te mantiene vivo. Por eso se fue de improviso a pasar unos días a otra ciudad. Un lugar para perderse entre monumentos y callejuelas estrechas en donde dejar enterrados sus miedos y empezar una nueva vida.

Y entonces ambos se encontraron para vivir una historia de amor tan breve que nadie se dio cuenta. Ella estaba sentada en las escaleras de aquél museo, pensando, con la mirada perdida en no se sabe qué recuerdos. Lo que él vio mientras se acercaba fue a la mujer más maravillosa derramando lágrimas. No podía ser.

Él secó sus lágrimas con una sonrisa y de repente desapareció. Tardó un instante en volver con la misma sonrisa de antes y una flores robadas al jardín del museo. Ella seguía llorando porque sus sentidos le dieron la voz de alarma cuando él la rozó. Y así juntaron sus miradas y luego sus bocas en un beso que los removió por dentro.

Un beso entre dos desconocidos que se necesitaban urgentemente. Ninguno de los dos quería separar sus labios del otro, sintiendo cómo los temores desaparecían, cómo las inseguridades se convertían en confianza, disfrutando del placer sin obstáculos. Y así estuvieron una eternidad. Una eternidad que duró el tiempo que dura un beso.

Decisiones

Durante nuestras vidas nos la pasamos tomando decisiones, desde qué ropa vamos a usar, qué zapatos, con quién salimos, a dónde vamos, qué queremos estudiar… en fin, un mundo de posibilidades a elegir, y éstas son las que conducen nuestro destino…
Muchas personas se han conducido de acuerdo a los estereotipos sociales, y terminan siendo quienes realmente no son en esencia. Tal es el caso de gente que no le agrada su trabajo, su familia, su casa, su automóvil, pero de alguna forma tiene que vivir en esas condiciones, ya sea voluntaria o involuntariamente.

TOMA EL CONTROL

Cuando uno toma el control de su vida, lo hace con base en las decisiones tomadas anteriormente. Si yo me propongo una meta específica, tomo las decisiones que sean necesarias que me conducirán a dicha meta. La gente exitosa tiene el control de su vida, y lo tiene gracias a que tiene el control de las decisiones que toman. Estas decisiones no requieren una segunda opinión, y con ello se asume el riesgo de afrontar cualquier error.

De lo anterior surge el miedo a equivocarse, este miedo se refleja en muchas personas ya que éstas han sido educadas para no tener errores. La gente exitosa ha tomado decisiones que les han pesado en algún momento, pero de estos errores han aprendido y han tomado diferentes decisiones que los han llevado a la cima de sus metas.

Al momento de tomar una decisión, debemos pensar si su consecuencia nos ayudará a crecer y ser mejores, en pocos días tendremos un notable cambio en nuestras vidas.

DECISIÓN -> CAMBIO

Los grandes cambios se originan a partir de decisiones muy sencillas, iniciando por lo más importante que es nuestra actitud. Nosotros decidimos si queremos tener un buen día o no, nosotros decidimos si queremos un mejor empleo o no; nosotros decidimos si queremos tener una buena relación de pareja o no.
A veces tomar una decisión que produzca un cambio no es sencillo, el primer paso es tomar las decisiones con firmeza y sin miedo, en ningún otro lugar más que en nuestras manos se encuentra el éxito o fracaso de nuestra vida en cualquiera de sus aspectos.

Poco a poco nos iremos acostumbrando a tomar decisiones que nos conduzcan al éxito, y cada vez será más sencillo. Y lo primero que hay que hacer para iniciar, es tomar esa decisión, que vamos a cambiar.

7 Cosas que odian las mujeres

1- Que tardes en contestar los mensages.

2- Que llegues tarde a una cita.             

3- Que la comprare con otra.  

4- Que la compares con otra mujer.

5- Que la ignores cuando estas con tus amigos.

6- Las amiguitas.

7- Que nunca la llames al celular.

Mi primera vez

"Mi Primera vez……….Que me enamoré 

Allí estaba ella, esa personita, que me hacia feliz cada minuto, cada segundo de mi vida. Esa chica llamada Natalia, que desde el día 21 de Febrero de 2013, estaba enamorado de ella. Hoy estamos a 21 de Mayo hago 4 meses ya, desde que empecé a sentir algo, por esa chica. Esa persona que cambio mi vida en cuestión de semanas, días perfectos, inolvidables… podría tirarme todo el tiempo hablando sobre ella pero, yo escribo esto para que veáis que estas historias no solo ocurren en películas, libros… sino que también pueden ocurrir en la vida real. 

Ese día ya estábamos de vuelta en el instituto, después de una semana en Irlanda, todos estábamos encantados por esa experiencia, pero yo no solo estaba contento por eso, lo estaba porque la chica, con la que menos relación tenia, me empezó a gustar. En clase de música le pedí que si podía sentarme al lado suyo, para poder hablar sobre el viaje. Fue una excusa, solo lo hice para estar más cerca de ella. Cada día que pasaba ese sentimiento se hacía más poderoso dentro de mí. Los días posteriores fueron increíbles, ella era la cosa más bonita de mi vida. Empecé a pensar que tal vez, ella podría sentir algo por mí. Los días mas felices de mi vida acabaron, un día que empezó magnifico con ella y acabó mal. Estábamos aburridos, le pregunte que si podíamos hablar, ella me preguntó sobre el que. Le respondí que me daba igual. Entonces llego ese momento, ese minuto, ese segundo, en el que mi corazón se paró, Ella me puso la pregunta de “ Yo te gusto?”. Me quedé pensativo, y al minuto le conteste. Le dije que Si, que ella era lo mejor que me había pasado. Hasta que vi esas cuatro palabras que dieron un vuelco a mi vida, lo que ponía era “Me gusta otra persona”. No podía contener mis lágrimas, ellas saltaban de mis ojos y yo sin poder aguantarlas como una persona fuerte. 
Aquel viernes, ese día en el que pasaba a su lado, y no podía mirarla a la cara, ni un “hola”. Ese día que sólo pensaba en quien podía ser ese chico, “Que habré hecho mal, le dado todo mi cariño” me dije. Una semana eterna, que se tranquilizó, gracias a una gran amiga, que me dijo que me ayudaría a que, Natalia sintiera algo por mí. Días pensando en que podría decirle para conseguir tal deseo. Empezó contándole como era yo, después le contó que nunca había estado así por alguien. Llegó el día en que alcé la cabeza y me dije “Porque estar mal si sigue siendo mi amiga” así que, yo continué queriéndola. 
Esas conversaciones, no eran normales, me preguntaba constantemente por un chico. Ese chaval, amigo mío desde primero de infantil. “Tiene que ser él” pensaba. Él no mostraba mucho interés por ella, al decirle a las espaldas palabras no deseadas para ella. ¿Por qué? Se lo decía a las espaldas y no a la cara. Un día, Natalia me preguntó, “¿Qué dice él de mí?” no tarde mucho en contestar, pero primero le dije, que no se lo diría sino me prometía no contárselo a nadie, ella aceptó y yo empecé a hablar. Por una extraña razón, ella se enfadó conmigo, todavía no entiendo ¿Por qué?, y también con ese chico. Me dijo que me olvidara de ella, yo le dije que no, que yo la esperaría, entonces decidió estar como sino nos hubiéramos conocido nunca. Y así fue. 
Esos días era un infierno para mí, y decidí que tal vez la tendría que olvidar. Todos los fines de semana me cogía la bicicleta y me iba a olvidar todos mis pensamientos y a pensar en nuevos y mejores. Por un momento llegué a pensar que la estaba olvidando, hasta que esa noche soñé con ella. Recuerdo perfectamente ese sueño, como si hubiera ocurrido en la realidad. < Allí estaba ella, esperándome en el banco del parque. En cuanto me acerqué ella se abalanzó sobre mí, llenándome la cara de besos, estuvimos la tarde juntos paseando > Hasta que llegó la hora de ir a la escuela y me desperté. Ella allí, yo aquí, solo un par de mesas nos separaban de estar juntos. Pero yo me centré y seguí con mi intención de olvidarla. Llegó de nuevo la noche, vine cansado de mi entrenamiento de football. Cerré los ojos, y la volví a ver. Allí estaba, con su pelo ondulado (a veces liso), sus ojos marrones, su boca perfecta… No paraba de quitármela de la cabeza, seguía en mi corazón, en el rincón mas profundo que tenia. Me di cuenta de que ella ha estado creciendo en mi interior y que ahora mi amor hacia ella era bastante grande y no se puede sacar por algo tan pequeño como yo. Llego el día en que venían nuestros amigos irlandeses, en la cena ya empezamos a hablar. Fue fantástica esa noche, yo solo estaba pendiente de ella. Risas y más risas pasamos con la comida. 
Al día siguiente llego la excursión a Toledo, estábamos genial, parecía que nada había ocurrido, todo seguía igual que al principio, con miradas, risas… 
A la noche estuvimos en la fiesta de un amigo, todo genial hasta que por un momento la vi allí, sentada con la mano en la cabeza. Me acerque y le dije que si le ocurría algo, ella me negaba lo que le pasaba. Le pedí que se viniera a tomar el aire conmigo al patio. De repente volvió al sofá, y allí la vi con él. Los dos tan cerca sentados… Me fui por no ver lo que podría suceder. 
A la media hora de irme, ya estaba preocupado por ella y decidí volver. Al entrar la vi llorando, me acerque y le pregunte que, que le pasaba ahora. Me dijo que era por ese chico, ese “amigo mío” si se puede llamar así, me pregunto que porque yo le dije a ella que, este le decía cosas a las espaldas. De repente me vi en un gran problema y sin pensar negué habérselo dicho. Toda la noche pensando el ¿Por qué? De mi respuesta. En ese momento pensé… “Porque? Perderla si es la persona que mas quiero. Y voy a quedarme con ese “amigo mío”, si él es el culpable de todos mis problemas”. 
Al día siguiente en la escuela, tuve valor de ir a hablar con ella, pero ella se negó a hablar conmigo, insistí, le dije que me daba igual perder a los demás antes que a ella, pero ella siguió a lo suyo. 
Llegó de nuevo el sábado, ella estaba a lo suyo, y yo a lo mío. Llegó otra vez, la misma situación, ella se encontraba mal, y me acerqué. Según ella, yo me había inventado todo. Le había creído a él y a sus amigos. Llego un momento en el que una lágrima, brotó de mis ojos. Yo en un sitio, ella en otro, separados y ¿Qué había hecho yo?. Al día siguiente empezaron a decirle ponerle cosas por las redes sociales, y yo mande un mensaje defendiéndola, a los tres minutos me llegó, una notificación de ella. Me decía que si podíamos hablar, y yo acepté, tuvimos una conversación normal, decía que no quería que estuviese así, quería verme como estábamos en Irlanda. 
Al día siguiente todo volvió a ser como antes, mi corazón volvía a sentir lo que antes. Cada día que pasaba, era más feliz, porque la tenía cerca de mí. Sentí más que nunca, que estaba enamorado de ella de verdad. 
Llego de nuevo el sábado, le pusieron una pregunta, diciéndole que no dejara escapar al chico que la quería. 
Le puse un mensaje, recordándole que, yo estaba ahí, que nunca dejaré de quererla. Tuvimos una conversación normal hasta un momento, en el que me dijo, que no quería una persona, que la quisiese como yo. Estuvimos hablando, no quería que volviese a suceder, pero al final sucedió. Se volvió a enfadar conmigo, no supe ¿Por qué?. Pero ella me repitió tres veces que no quería volver a ser amigos, nunca más, que hiciésemos como si no, nos conociésemos. Estos días sólo han coincidido miradas, pero ninguna palabra. 
Al día siguiente un amigo mío me cuenta, que a él también le gusta ella, y a los cinco minutos me llega un mensaje de ella diciéndome que le gusta un poco ese chico. ¿A qué viene eso? No dije yo nada y me llegan dos mensajes diciéndome que los dos se gustan… 

Esta historia no habrá terminado aún, porque cada historia de amor tiene un principio feliz y a veces un final triste. Yo he vivido el final triste, ¿ME TOCARÁ VIVIR EL PRINCIPIO FELIZ?....."

Amor inesperado

"Hubo un momento en mi vida, en el que creí que no encontraría a nadie, que me hiciera sentir enamorada, incluso perdí el anhelo por estar nuevamente con alguien. Pero un día sin buscarlo simplemente llegó. No había pensado en él como mi pareja y sin embargo de repente un día nos tomamos de la mano. La sensación tan agradable de sentir sus manos en las mías había encendido una pequeña flama de emoción. Los momentos escasos que pasábamos juntos eran los más felices que podía tener. Siempre albergaba la esperanza de que terminamos juntos y por que no formar una familia. En ocasiones me decía que estábamos a la vez tan cerca y al mismo tiempo tan lejos. Y fue entonces cuando lo entendí se estaba alejando de mí, mi problema es que ahora yo le amaba. Yo me fui a otros rumbos a trabajar y a él no lo volví a ver. Y a pesar de ya no verlo sigue en mis recuerdos, sigo amándolo a pesar del tiempo y aún que mi corazón está lleno de tristeza y de dolor lo siento al mismo tiempo tan cerca y tan lejos."